El 2020 fue un año de grandes cambios mundiales y transformaciones nunca imaginadas, la pandemia llegó a cambiarlo todo, el rumbo de nuestros planes y las formas de alcanzarlos. Recibimos un nuevo año 2021 en una continuidad de la crisis mundial que se está viviendo fruto de la pandemia, el confinamiento es más estricto, la tasa de desempleo mundial es la más alta en las últimas décadas y la situación sanitaria que vivimos es preocupante, pero en medio de la adversidad sentarse a llorar no es la solución.
Pese a lo que muchos piensan, las crisis nos permiten salir de nuestra zona de confort, nos obligan a reinventarnos y a pensar más en los riesgos que corremos de perder un empleo o de que nuestro negocio quiebre. Cuando todo está estable son pocas las transformaciones que se producen en nuestras vidas, pero en tiempos de adversidad los cambios dejan de ser opción y se convierten en la única vía para poder subsistir y alcanzar lo que nos proponemos.
En base a la experiencia vivida durante el año 2020, que marca la propagación contundente del virus y la experiencia de otras personas que pudieron reinventarse durante este proceso de crisis, les comparto recomendaciones puntuales a tomar en cuenta para continuar un proceso de crecimiento y superación pese a la pandemia:
No le pongas fecha final a la pandemia. Muchas personas cometieron el grave error de ponerle fecha final 31 de diciembre 2020 a la pandemia, como una forma de llenarse de optimismo ante la situación, aunque resulta ser un grave error. Mira la pandemia como algo que estará con nosotros por mucho tiempo o al menos sus efectos, eso te permitirá diseñar tus planes contando con ella y no estarás en una espera que pudiera convertirse en frustración.
No pases del mes de enero sin un plan y defínelo a corto plazo. En tiempos de crisis los planes a largo plazo tienen una alta probabilidad de fracasar, ya que los cambios son impredecibles y pueden variar de un día al otro, transformando todo lo que teníamos diseñado, pero no contar con un plan es un riesgo mayor. Enero es un mes clave para adaptación y preparación, lo ideal fuera diciembre, pero si no tienes ese plan enero es el mes para elaborarlo y definir detrás de que irás. Ese plan debe ser revisado cada mes, para ir evaluando los cambios que se han producido.
Evalúa cuál es tu situación laboral o comercial en el caso de tener un negocio. El desempleo seguirá en aumento y a muchos negocios se les hará imposible subsistir en las situaciones actuales, es algo a lo que no podemos darle la espalda y mucho menos hacernos los ilusos, debemos entender cuál es nuestra situación actual, cuál es el riesgo que tenemos de perder nuestro empleo o nuestro negocio, eso nos permitirá tener diseñadas acciones rápidas e ir pensando en otras opciones.
Mucho cuidado con las inversiones que realices. En tiempos de pandemia el principal objetivo está basado en SOBREVIVIR, y en ese proceso los riesgos hay que tratar de que sean los menores, porque frente a una situación difícil perder un capital que nos permita mantenernos a flote es peligroso. Contrario a lo que muchos piensan en las crisis nacen los más exitosos proyectos, ya que llegan a ofrecer un producto o servicio que el mercado necesita para resolver un problema, pero debemos ser muy observadores sobre las inversiones que hacemos, y si encontramos una brecha para un gran emprendimiento no dudar en dar el paso antes de que sea tarde, pero con la seguridad de que tenemos la confianza en ese proyecto y hemos medido los riesgos.
No pierdas el tiempo con tanto entretenimiento. El entretenimiento es fundamental para una mente sana y una buena creatividad, pero debe tener su medida. El tiempo que pasamos en casa ahora es mayor y nos puede llevar a estar más ociosos de lo normal, invirtiendo mucho tiempo a las redes sociales, series, películas, entre otros. Toma el tiempo libre para fortalecer tus conocimientos de la forma que prefieras, leyendo libros, viendo documentales, siguiendo páginas en redes sociales que tengan contenido que sirvan a tu crecimiento y tomando cursos que aporten a tus objetivos.
Coloca lo digital como eje principal de todas tus acciones y proyectos. La era digital ha tenido un crecimiento cada vez más acelerado, con la pandemia esto se ha elevado de forma incomparable. La virtualidad será lo que sostendrá todo lo que veremos en el presente y futuro, cualquier emprendedor, profesional o proyecto que no esté sustentado en los aspectos digitales tendrá fecha de vencimiento próximo y dejará de ser competitivo. Preparación y formación en el aspecto digital es fundamental.
Rodéate de las personas claves. En tiempos de adversidad lo que menos necesitamos es personas con energías negativas o que roben la nuestra, un camino hostil se puede cruzar con éxito teniendo a las personas claves, esas que nos motiven, que nos impulsen y nos orienten sobre aspectos en los que en momentos nos cegamos. Elige bien los pasajeros de este viaje y depura aquellos que no te aportan nada más que desesperanza.
A cada uno de estos aspectos agrégale algo fundamental que será el combustible que te impulsará, CREE EN TI y ESCÚCHATE, cuando no creemos en nosotros y no aprendemos a escucharnos, fracasamos en nuestros objetivos, pues en muchas ocasiones nuestro entorno influye de forma desfavorable para que renunciemos a lo que ellos llaman locura, debemos estar listos y preparados para escuchar, pero sobre todo para escucharnos nosotros y defender nuestro plan.
El año será lo que te propongas y la visión que le des a esta situación, aprende a entender que esta no es una anormalidad, es la nueva normalidad que tenemos y la opción que nos queda es avanzar con ella sin perder el objetivo.
Feliz Año 2021
