Cada día es más común encontrarnos con el escenario de niños que solo cuentan con su madre y están completamente huérfanos de padres que están vivos. Niños que no han tenido la oportunidad de jugar o compartir experiencias con ese que los procreó, a cambio reciben no más que unos cuantos pesos porque manda la ley.

Sin importar como busquemos tapar el sol con un dedo, todo ser humano en sus primeros años de vida necesita más que en cualquier etapa que Papá y Mamá cumplan su papel, no importa lo autosuficiente económicamente que sea la madre, esta ausencia de padres vivos esta afectando el autoestima, el desarrollo y la guía que necesitan los niños de este binomio en sus vidas, que en gran parte de los casos se encuentra solo una madre con todas las precariedades económicas y un hombre que olvida que existe un ser que fue traído al mundo por el.

¿Qué criterio estamos teniendo para procrear? ¿Cómo elegimos cuál será la pareja para tener nuestros hijos? O simplemente estamos por la vida teniendo sexo y si se pegó pues amén. En un mundo tan desarrollado donde existen todos los métodos para evitar un embarazo, usted puede evitarle a un niño la amargura de tener que vivir en una lucha constante de saber que es huérfano de un padre irresponsable que esta vivo, que goza y disfruta quizás con otros hijos.

Una pareja no está obligada a vivir juntos por el hecho de tener un hijo, si no hay amor ni interés solo se harán más daño, pero el estar separados no implica que un hijo tenga que vivir solo de los dos pesos que le manda Papi, pues su cariño, momentos de calidad y esa imagen paterna nunca la podrá tener. Ver solo el mensajero llegar con el envío de lo que solo sirve para comer o vestir y en algunas ocasiones no llega ni el dinero ni mucho menos el cariño.

Seamos más responsables, un ser que no decidió nacer no merece vivir con la ausencia de algo que será de tanta fortaleza para su vida, Papi y Mami cada quien cumpliendo su función, NO importa si están juntos o separados, el amor y el cariño no necesita estar conectado para ser bien recibido.

Seleccionemos para nuestros hijos el mejor de los padres y la mejor de las madres, ya que ellos no tienen la oportunidad de elegir.

Audi Rodríguez

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