El tema de los exorbitantes impuestos de los boletos aéreos de la República Dominicana no es un tema nuevo, mucho se ha escrito al respecto y las manifestaciones de muchos dominicanos residentes en el país y en el extranjero, ha sido algo que no ha cesado, aunque nada se ha logrado por años, es una lucha a la cual no podemos bajarle la guardia, y ahora más, que nos encontramos en una de las crisis económicas mas significativa de las últimas décadas.
República Dominicana posee los más altos impuestos de la región para los boletos aéreos, que pueden a llegar a superar el 50% del costo total, algo que resulta totalmente absurdo y abusivo, si tomamos en cuenta que las vías de transporte para poder llegar a un país representan el aspecto fundamental a la hora de un turista elegir un destino, ya que no importa lo económico que sea el hospedaje y los gastos de alimentación durante una estadía, si las vías de transporte resultan excesivamente costosa un turista puede optar por otro destino.
En momentos en los que se está luchando por la reactivación del turismo en la República Dominicana y en todo el mundo, ser competitivos en aspectos de tarifas es fundamental, no solo con hoteles económicos, las tarifas de los boletos aéreos juegan un papel fundamental en el presupuesto del turista. En este proceso del plan de reactivación del turismo las autoridades han apostado por el turista local para cubrir las ocupaciones de alojamientos, pero no pueden olvidar a ese dominicano que reside en el extranjero que representa un aporte importante a la economía, no solo en el envío de remesas, esos dominicanos cuando vienen de vacaciones a la República Dominicana su gasto supera al de cualquier turista que se hospeda en un hotel por varias noches.
El dominicano que vive en el extranjero no solo se hospeda unos días en los hoteles del país, también consume en las comunidades locales, impacta la economía de sus zonas de procedencia y donde pernotan durante su estadía, así como a las zonas turística. Es un gasto significativo que va desde el boleto aéreo, la renta de un vehículo, el hospedaje en un hotel y los gastos que realizan en alimentos y bebidas, es un movimiento importante para la economía dominicana, pero muchos de ellos se ven limitados a visitar el país por los precios exorbitantes de los boletos aéreos.
Los dominicanos que residen en el país también son afectados, ya que ven limitado el interés de viajar cuando al calcular el costo de los boletos aéreos supera el gasto de una estadía completa en otro destino, afectando sus posibilidades de ocio y las oportunidades de conocer otros destinos del mundo.
Las altas tarifas aéreas en la República Dominicana afectan a todo aquel que desee viajar desde o hacia el país, sin importar la región del mundo en la que se encuentren. Para demostrar la realidad de esta situación hicimos una comparativa de un boleto aéreo cotizado en la misma fecha con salida desde el aeropuerto John F. Kennedy en New York hacia la República Dominicana, comparado con los destinos turísticos del Caribe que son competencia (Cuba y Puerto Rico), en fecha del 20 de noviembre 2020 por la misma aerolínea. El mismo boleto aéreo hacia la República Dominicana paga 40% de impuestos del total de la tarifa, hacia Cuba 17.81% y hacia Puerto Rico 4.95%, algo totalmente desproporcional y nada competitivo.
Si hablamos de reactivación del turismo debemos pensar en todos los factores que afectan la decisión de un turista al momento de elegir un destino, y sin lugar a dudas en la República Dominicana estamos muy lejos de nuestros mayores competidores, donde un turista extranjero pueda optar de forma fácil por otro destino, un dominicano hace el esfuerzo por el interés de estar con sus familiares y en su tierra, pero limita la frecuencia de viajes que pueda hacer al país durante el año por las altas tarifas que debe de pagar solo en los impuestos del boleto aéreo.
Es tiempo de que nuestros legisladores y las autoridades comiencen a pensar de forma más amplia, visualizando que ese dinero que desean ganarlo todo en un ticket aéreo, podría un dominicano o extranjero aportarlo por otras vías, si se les brindan las facilidades de llegar al destino con tarifas justas.
Audi Rodríguez
