Cuando inicias tu incursión en el mundo laboral sueles escuchar constantemente lo importante de los años cumplidos en este ámbito, la famosa experiencia que suele ser mezclada con “Estabilidad”, donde para muchos es el calificativo de una persona que tiene 5 años, 10 años y hasta 25 años en un mismo empleo, que por cierto no es suyo, simplemente es un empleado con antigüedad, pero ¿qué hay de cierto en esto?

Estudios reflejan que las personas con estilo pro-activo son las que tienden a tener más éxito en la vida, por su afán incesante de buscar más, siempre quieren experimentar cosas nuevas y odian sentarse a ver pasar los años en una misma silla como sí fuera un castigo. Encontrarnos la misma persona en el mismo mostrador después de 5 años de visitar un establecimiento comercial es muy común y sería un error llamarle a esto “Estabilidad”, una persona que ha entregado 5 años de su vida haciendo lo mismo, con una mecánica programada y sin esperanza de calar más allá que un aumento insignificante, no es estabilidad.

El espacio de crecimiento del ser humano tiene un ciclo muy corto, se deben hacer las cosas justo a tiempo para no pagar el precio de estancarse a la silla después de tantos años, donde en cualquier momento puede llegar la desesperación o un llamado superior para agradecer por los años de servicio a la empresa, quedando sólo en sus manos unas prestaciones de tantos años, que sólo sirven para vivir unos meses. Es vital romper la soga que nos ata cuando se ha terminado el ciclo, o podríamos estar pagando el precio de caer en un abismo donde salir puede ser muy difícil.

No importa cuantos años dures, sí estos años vienen acompañados de crecimiento personal, profesional y económico, cuando uno de estos tres elementos falla, todo comienza a ser un castigo, ese trabajo que sólo te da para poder vivir día a día, sin ninguna satisfacción personal y mucho menos una motivación para levantarte cada mañana con la esperanza de poder continuar detrás de nuevas metas y propósitos.

Es mejor la inestabilidad acompañada de crecimiento, que estar estancado disfrazado de estabilidad, los años son crueles, te van quitando capacidad y oportunidad en el mercado profesional, si no aprovechas cuando el tiempo está a tu favor para navegar en mejores aguas, pudiera ser muy tarde cuando quieras tratar de buscar nuevos objetivos y senderos que te lleven a cosechar en tu propia tierra y no en la ajena.

No te acomodes a la silla, el estático muere sin sueños y sin motivación.

Audi Rodríguez

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