¡Hombre! lo primero que debes de entender es que ella NO es TUYA, ni tú eres de ella, una relación es algo que así como comienza puede un día terminar, sin contratos, sin clausulas y sin penalidades, es simplemente estar hasta que ambos deseen estar y eso no implica que no se amó un día o que la relación no fue verdadera, simplemente ese discurso que dice: “Hasta que la muerte los separe”, es totalmente falso, una relación es hasta que ustedes decidan separarse, nadie es dueño de nadie y cuando cualquiera sienta que no debe continuar, pues cada quien debe seguir su camino. Lo forzado deja de ser placentero, todo fluye mejor cuando ambos quieren, pero cuando eso se acaba de una de las dos partes es mejor decir adiós.

El corazón es capaz de volver amar, pero no tiene oportunidad de volver a latir cuando se le arranca la vida a alguien. Son incontables las veces que podemos volver amar y con mayor intensidad, pero cuando entendemos que nuestra vida depende de otra persona, estamos muy mal, debemos urgente buscar ayuda antes que el infierno interno se desate, hay que aprender hablar cuando se siente por dentro que se está perdiendo el control, decir necesito ayuda no te hace una persona débil, te hace un ser fuerte frente a tus sentimientos y tus emociones. Una relación nace en el transcurso de tu vida, cuando ya eres alguien capaz de elegir y decidir, por lo tanto, no necesitaste de esa persona para nacer, crecer y desarrollarte, eso significa que tampoco morirás si esa persona se va.

Si vas a regalar cosas materiales para comprar el cariño o la lealtad de alguien, mejor véndeselo y quizás nunca se realice el negocio. Una relación no puede verse como un cheque al portador o una propiedad en la que inviertes y esperas que nunca te la roben, cuando decides dar o regalar cualquier cosa material a una mujer debes estar consciente que lo haces porque lo sientes dentro de ti y no porque deseas que sea un intercambio de cariño por dinero, para eso existen quienes venden ese servicio y no permitirán nunca que te enamores. Una persona no es un bien material que adquieres o una mascota que tendrás siéndote fiel toda la vida, es un ser humano con defectos y virtudes, que un día tiene el derecho a decir NO QUIERO MÁS, me voy.

Cuando estamos en medio de una relación la cual queremos con todo nuestro ser, no podemos vivir pensando en el final, pero tampoco podemos olvidar que un día puede terminar y que esa persona nos puede fallar, cuando dejamos todo abierto a las posibilidades nada nos podrá sorprender o ahogar, amaremos con todo nuestro ser, pero si nos toca renunciar nos levantaremos con la misma intensidad. La vida es lo más valioso del mundo, podrás amar a miles de mujeres, pero no podrás vivir una vida miles de veces, cuando le arrancas la luz a alguien y te la apagas tú, estas dejando un vacío irreparable y un dolor incurable, al final por todo lo que creíste luchar terminaste matándolo y no tendrás ni una solo oportunidad de volver a sanar.

Cuando sientas que te ahogas, pide AYUDA, cuando sientes que todo se te va, pide AYUDA…no esperes a llegar al punto de apagar una vida que tanto amaste, porque eso solo demuestra que NUNCA la mereciste.

Audi Rodríguez

Compartir