Las Redes Sociales han servido como el canal para mostrarnos un gran problema que ya conocíamos, pero que ahora nos permite verlo desde otra óptica, con una realidad tan dolorosa, y es el ver como muchos padres son captados en vídeos mientras someten a sus hijos a palizas de una forma bestial y desconsiderada, sin la menor piedad ante la inocencia de niños que no hacen más que vivir una infancia de travesuras y de descubrir nuevas cosas que los convierten en inquietos exploradores.
El error está en creer que la violencia física contra un niño lo forma y lo educa, cuando en realidad es todo lo contrario, esa violencia desmedida lo que hace es crear hombres y mujeres más violentas, que los lleva a entender que con violencia se resuelven las situaciones de conflictos, llevando a que su infancia sea dolorosa, frustrante y llena de resentimientos hacia sus padres.
Es un problema que viene desde la educación de los padres, personas que fueron formadas mediante esos métodos de violencia, y al carecer de un nivel de educación básica los lleva a actuar como bestias, pasando de generación en generación esos métodos de violencia y maltrato físico, que no se detiene solo en los niños, llega al punto de tocar la violencia entre parejas. Es por esto que es tan importante la educación de un pueblo, cuando este posee un nivel de educación superior, estos males son minoritarios y más fácil de contraatacar.
¿Unas nalgadas no vienen mal?
En esta época donde los niños y adolescentes muestran una actitud más indisciplinada hacia sus padres, donde medios como el Internet y el acceso a la información los convierte en personas más empoderadas, recibiendo un abanico de información, tanto positiva como negativa, se discute mucho sobre la ausencia de los métodos antiguos, como la nalgada, la correa, el chancletazo y otros más, los cuales eran métodos de corrección, donde en unos niveles eran de manera sutil, pero en otros eran abusivos y desproporcionales.
Los tiempos han cambiado, los castigos también deben cambiar también.
Siempre he sostenido que cuando usted pierde la capacidad de que un hijo le entienda con palabras, es la frustración que le hace llegar a los golpes. Los tiempos han cambiado y las preferencias de un niño en los años 90 no es ni semejante a estos tiempos actuales, a los niños ya no les importa si les prohíben salir, al contrario, se le convierte en un placer, para tener más tiempo de estar pegado a los videojuegos, a la computadora, a la tableta y demás equipos electrónicos, por lo tanto ya tenemos definido que es lo que más aman los niños de estos tiempos, que mejor castigo que prohibirle el uso de estos.
Estamos en una época muy difícil con un flujo de información que nos está haciendo más daño que bien, por la manera en la que se está empleando, cualquier niño o adolescente se quita la vida por la corrección de uno de sus padres, es importante saber y mantenerse educándose de como ir llevando estos seres tan especiales, que parecieran que vienen con un software distinto a antiguas generaciones. Es vital no dejar que la voz pierda fuerza de respeto y temor, para así evitar tener que llegar a los golpes o al maltrato extremo.
Los niños no deben ser maltratados, ni golpeados, deben ser educados y formados con amor y disciplina .
¡Basta ya del abuso infantil y de cualquier tipo de abuso!
Audi Rodriguez
