En el transcurso de los años y el aumento positivo de la liberación e independencia de la mujer en la sociedad, ha traído consigo relaciones amorosas más caóticas, la violencia entre parejas crece cada día más, la muerte de mujeres a mano de sus parejas a nivel mundial se encuentra en índices alarmantes.
Los Celos son el detonante de grandes tragedias, comenzando a dar señales con acciones menores, reclamos, restricciones, persecuciones y limitaciones de la libertad de la que cada ser humano tiene derecho a disfrutar. El sentimiento de posesión y el temor a perder lo que sienten como suyo(a) es lo que comienza a detonar este sentimiento de celos en muchas personas que por momentos llega a puntos incontrolables.
Hombres y Mujeres que por sentimientos amorosos llegan a convertirse en silentes apoyadores de comportamientos de sus parejas que van arrojando señales de cual será el desenlace fatal de todo. Con frecuencia mayor vemos como mujeres celebran decir que su pareja las celas, ya que comienzan a verlo como una demostración de amor, hasta que llega a convertirse en el camino que lleva algunas a la muerte.
La oleada de asesinatos de mujeres a manos de sus parejas continuará hasta que estas no comiencen a tomar acciones de alejarse o tratar psicológicamente a estas personas con traumas de celos enfermizos, donde pongan un “stop” antes que lleguen a la recta final. Muchas mujeres optan por decir no sigo más cuando ya es muy tarde.
Los celos no son una muestra de cariño, es inseguridad, miedo y obsesión, son la principal señal de un problema que debe ser tratado a tiempo, permitir que las cosas lleguen al punto donde salgan de control, es apostar a su desenlace fatal, donde ya no se pagará con un reclamo, golpe o agresión de otro tipo, se pagará con la vida.
Audi Rodríguez
