Foto: quisqueya.regalii.com
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Cada campaña internacional que se inicia con la finalidad según citan sus organizadores de ” boicotear el Turismo Dominicano”, donde varios representantes gubernamentales de los Estados Unidos se han manifestado al respecto, llamando a no visitar la República Dominicana para afectar su turismo, por el solo hecho de aplicar sus políticas migratorias, es otra más de la muestra de la doble moral que poseen estas potencias mundiales que no conocen ni un punto de la realidad Dominico – Haitiana.

Nuestra zona turística principal la cual genera más visitas de turismo internacional y donde se encuentra la mayor inversión en infraestructura de hoteles de lujo es Bávaro, Punta Cana; resultará muy común encontrar en cada área laboral del hotel un nacional Haitiano laborando en completa armonía y paz junto a nacionales dominicanos. La capacidad e inteligencia para el dominio de varios idiomas ha llevado a los Haitianos a ganarse espacios laborales dentro de nuestro Turismo, a lo cual nunca nos hemos opuesto y mucho menos condenado que nuestros vecinos sean parte de nuestro motor productivo como es el turismo.

Si estos representantes internacionales antes de hablar vinieran a palpar la realidad que se vive entre estos pueblos, visitar el pueblo de Bávaro, zona turística privilegiada del país, es pensar por un momento que estás en Haití por la cantidad considerable de nacionales haitianos que residen en esa zona, bajo unas condiciones dignas humanamente, ningún tipo de represión y en completa armonía con los dominicanos, es lo que se vive en estas zonas. No solo en Bávaro, Punta Cana es significativa la presencia de mano de obra haitiana, destinos turísticos como Puerto Plata y Samaná encontrarás considerable presencia haitiana en puestos laborales.

El nacional haitiano en nuestro turismo tiene una participación desde la creación de la obra hasta el recibimiento, trato, atención y animación al turista. Encontrarás en las construcciones de estas infraestructuras que la mayor cantidad de mano de obra es Haitiana, lo que nos muestra la participación directa que tiene el ciudadano haitiano en nuestro Turismo, y esto seguirá en aumento ya que muchos jóvenes haitianos se están preparando en nuestras universidades en la carrera de turismo, donde tendrán espacios en nuestro mercado laboral pasa seguir desarrollándose y nosotros se las vamos a brindar.

Llamar a un Boicot al turismo de un país bajo estas condiciones, condenándonos de racismo, es muestra del gran desconocimiento de esta realidad. En todos los aspectos de nuestra relación con el pueblo haitiano solo se ha destacado la HUMANIDAD y SOLIDARIDAD, es injusta esta campaña sucia, la cual debe ser condenada no solo por nosotros como Dominicanos, también por los ciudadanos haitianos que trabajan y se benefician de nuestro turismo.

Audi Rodríguez

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